Ingredientes clave
Hemos seleccionado los mejores ingredientes para cuidar, mejorar y revitalizar su cuerpo, mente y espíritu. Nuestros productos están elaborados con ingredientes de primera calidad, aceites naturales y productos botánicos, no contienen parabenos, ftalatos ni sulfatos, y siempre se prueban en amigos y familiares, no en animales.
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Ingredientes deliciosos
¡Todos nuestros productos están elaborados con los mejores ingredientes para ti y tu hermosa piel! Hemos trabajado arduamente durante años para que nuestros productos sean lo más naturales posible al incorporar ingredientes orgánicos y eliminar todos los parabenos y otros químicos agresivos. Siguen siendo exactamente las mismas fragancias que te encantan, ¡solo que mejores! Huelen tan bien que dan ganas de comerlos, ¡pero no lo hagas!
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Cuidado eficaz de la piel
Nuestros productos están formulados de manera consciente y con un propósito. Cada producto contiene ingredientes que abordan eficazmente los problemas más comunes del cuidado de la piel y están repletos de vitaminas y nutrientes para nutrir y reponer tu piel. Nuestros productos realmente funcionan y sabemos que quedarás satisfecho con los resultados. ¡Prepárate para disfrutar de la mejor piel de tu vida!
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Fórmulas seguras
Jaqua realiza pruebas en amigos y familiares, ¡pero nunca en animales! Todos nuestros productos pasan por largos períodos de prueba para garantizar que sean estables y seguros para tu piel. Nos negamos a utilizar productos químicos agresivos como parabenos, ftalatos, sulfatos o colorantes artificiales que pueden ser perjudiciales para tu piel. ¡Nuestros productos están elaborados con ingredientes naturales que te harán sentir muy bien al usarlos!
Aceite de almendras (Prunus Amygdalus Dulcis)
Las propiedades emolientes del aceite de almendras ayudan a calmar la picazón y la inflamación de la piel causada por la piel excesivamente seca, además de ser excelente para calmar la piel bronceada.
Jugo de hoja de aloe (Aloe Barbadensis)
El aloe barbadensis es la especie de aloe más concentrada y nutritiva. La aplicación tópica de este gel acelera el proceso natural de división celular y rejuvenecimiento de la piel.
Aceite de Aguacate (Persea Gratissima)
Este aceite tiene un alto contenido de esterolinas, que se absorben fácilmente en los tejidos profundos, lo que ayuda a reducir y curar las manchas de la edad, los daños causados por el sol y las cicatrices. Su alto contenido de vitaminas A, B y E lo convierten en un tratamiento hidratante para la piel.
Aceite de coco (Cocos Nucifera)
El aceite de coco es un emoliente rico en ácido láurico, con propiedades antibacterianas y antimicrobianas, y ácido linoleico, que mantiene la piel hidratada. Cuando se usa sobre la piel, crea una capa protectora que puede reparar grietas y acelerar la curación de la piel dañada.
Aceite de jojoba (Simmondsia Chinensis)
El aceite de jojoba promueve la elasticidad y reduce la aparición de líneas finas, brindando a la piel una suavidad duradera sin dejar una sensación grasosa o pegajosa. También contiene propiedades antibacterianas naturales para mantener la piel limpia.
Extracto de kiwi (Actinidia chinensis)
Los kiwis son ricos en carotenoides y ácido ascórbico, dos poderosos antioxidantes que favorecen una piel sana.
Extracto de fruta de mango (Mangifera Indica)
Los mangos están repletos de antioxidantes que protegen la piel del daño celular. También contienen vitaminas E, A y C, que favorecen la formación de colágeno y reducen el acné y los signos del envejecimiento.
Aceite de semilla de espuma de pradera (Limnathes alba)
Uno de los aceites más hidratantes disponibles, el aceite de semilla de espuma de pradera permite una aplicación duradera sin volverse grasoso.
Extracto de flor de la pasión (Passiflora incarnata)
Perfecto para un masaje relajante, este extracto analgésico calma y alivia la piel. El extracto de pasiflora también tiene un alto contenido de ácidos grasos y vitaminas A y C, lo que reduce las líneas finas y las arrugas y mantiene la piel suave y tersa.
Agua de Rosa Damascena
El agua de rosas tiene propiedades antibacterianas y antioxidantes que la convierten en una excelente herramienta para mejorar la tez de la piel, reducir el enrojecimiento y el acné y reparar la piel dañada.
Aceite de semilla de cártamo (Carthamus tinctorius)
El aceite de semilla de cártamo tiene un porcentaje naturalmente alto de ácido linoleico, que se absorbe rápidamente para ayudar a hidratar, nutrir y reestructurar la piel.
Manteca de karité (Butryospermum parkii)
La manteca de karité actúa como una barrera en la superficie de la piel para ayudar a retardar la pérdida de humedad mientras hidrata y suaviza profundamente la piel.
Aceite de soja (glicina de soja)
El aceite de soja actúa como agente emulsionante, aumentando la flexibilidad de la piel y reduciendo la descamación.
Aceite de hoja de árbol de té (Melaleuca alternifolia)
El aceite de árbol de té tiene efectos antibacterianos y antiinflamatorios naturales que ayudan a tratar el acné, reducir el enrojecimiento y aliviar la picazón y las quemaduras solares. También ayuda a equilibrar la producción de aceite de la piel e inhibe el crecimiento de bacterias.
Corteza de sauce blanco (Salix alba)
La corteza de sauce blanco es rica en flavonoides y taninos, poderosos antioxidantes que protegen la piel de los daños ambientales. También es un exfoliante natural que puede ayudar a destapar los poros y reducir las líneas finas, haciendo que la piel luzca más suave, tersa y firme.
Agua de hamamelis (Hamamelis virginiana)
El agua de hamamelis cierra los poros, reduce la inflamación y unifica el tono de la piel. Sus propiedades astringentes ayudan a combatir el exceso de producción de grasa en la piel y evitan el crecimiento de bacterias.